El Papa León XIV ha definido sus prioridades geopolíticas para los próximos meses, enfocándose en la situación en Medio Oriente y en los intentos fallidos de alcanzar un acuerdo de cese del fuego entre Ucrania y Rusia.
Según fuentes del Vaticano, el pontífice recibe informes diarios sobre el conflicto entre Israel y el grupo Hamas, el cual lleva más de 600 días activo y mantiene a 58 rehenes israelíes, entre vivos y fallecidos, en túneles subterráneos en la Franja de Gaza.
Los reportes también indican que la ayuda humanitaria —incluyendo alimentos, agua e insumos médicos— no ha logrado ser distribuida completamente, a pesar de los esfuerzos conjuntos de Estados Unidos e Israel. Esta limitación representa una de las principales preocupaciones humanitarias en la región.
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Además, la diplomacia vaticana ha actualizado al Papa sobre las negociaciones entre la administración estadounidense encabezada por Donald Trump y el gobierno iraní, en un intento por frenar el avance del programa nuclear de Teherán.
Existe inquietud en el Vaticano ante la posibilidad de que un eventual fracaso en dichas negociaciones conduzca a un ataque militar israelí contra las instalaciones nucleares iraníes.
En paralelo, el Papa continúa apostando por una mediación entre Kyiv y Moscú como uno de sus principales objetivos diplomáticos. Sin embargo, según fuentes cercanas, el Vaticano percibe que el presidente ruso Vladimir Putin no considera viable una negociación auspiciada por la Santa Sede, al no formar parte de su estrategia militar actual.
Con información de Infobae
MIAV
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