El camino al 2 de septiembre, fecha en que se definirán los candidatos que competirán por la presidencia en 2024 continua moviéndose y parece que se necesitan más carriles para quienes quieren contender el lugar en las boletas.
Ahora iniciamos con la oposición, pues la senadora y expresidenta nacional del PRI, Beatriz Paredes, presentó su registro formal como precandidata del Frente Amplio por México. “No tengo cola que me pisen, seguimos adelante en este proceso sin renunciar, ni ocultar, ni disfrazar mi biografía“ aseguró la legisladora tlaxcalteca.
Manifestó que la política requiere experiencia y ética personal que garanticen que las ofertas que se plantean a los ciudadanos con un análisis objetivo, sean viables y que las personas sepan cómo llevarlas a cabo.
Enfatizó “yo no he brincado de un lado a otro para pretender purificarme, con mi historia política he salido adelante levantando la cara y mirando de frente“. Resaltó que “este proceso es un parte aguas que define si el horizonte de nuestra patria será el de la evolución democrática o será el de la regresión autoritaria“.
Pero no es la única que ha puesto su nombre en la lista, ya que el exgobernador de Tamaulipas, Francisco García Cabeza Vaca, se vuelve otro de los posibles presidenciables para el PAN, PRI y PRD.
Su hermano, el senador Ismael García Cabeza de Vaca, se presentó ante el Comité organizador para entregar su acta de nacimiento, copia de credencial para votar, currículum vitae, exposición de motivos, declaración 3 de 3 en materia de transparencia y declaración 3 de 3 en contra de la violencia, documentos requeridos para la inscripción.
Fue acompañado por la esposa y los hijos del exgobernador durante el proceso para inscribirlo como aspirante presidencial. El 5 de julio pasado, el exmandatario estatal publicó un video en el que anunció su registro.
Tras registrar a su hermano y acompañado por la familia, Ismael García Cabeza de Vaca dijo que realiza los trámites correspondientes porque «creemos en la lucha y democracia». El legislador aseguró que en breve se presentará públicamente su hermano, quien no ha hecho ninguna aparición pública en México desde hace 10 meses cuando dejó la gubernatura.
El exgobernador de Tamaulipas es investigado por los delitos de uso de recursos de procedencia ilícita y delincuencia organizada, aunque un juez retiró la orden de aprehensión en su contra.
Por si no lo viste:
Del otro lado de la cancha, con el partido oficialista, una de las principales «corcholatas» vuelve al ojo del huracán con una nueva polémica que llenó la ciudad con espectaculares un poco dudosos.
En distintas partes de la Ciudad de México se puede ver publicidad anunciando un libro llamado «Claudia Sheinbaum: Presidenta», texto que aún no se encuentra en las estanterías de las tiendas pero que ya es gritado a los cuatro vientos.
Se calcula que los anuncios tienen un costo promedio de entre 20 mil y 40 mil pesos mensuales.
Esto ocurre tras darse a conocer los gastos excesivos por parte de 2 de los precandidatos morenistas: tanto la exjefa de Gobierno como del senador Ricardo Monreal.
Monreal Ávila ha erogado 916.3 mil pesos, mientras que Claudia Sheinbaum reportó gastos por 868.7 mil pesos, en comparación a Adán Augusto López, quien reportó 577.5 mil pesos, del 19 al 30 de junio, o a Marcelo Ebrard, quien ha gastado 385.5 mil pesos en el mismo periodo.
En las reglas de la contienda interna de Morena, a propuesta del Presidente Andrés Manuel López Obrador, se exigió a los participantes realizar una campaña austera, a través del diálogo directo con los ciudadanos. Pero los propios competidores morenistas han denunciado los excesos registrados en las primeras semanas de campaña.
Tras darse a conocer esta noticia, la compañía editorial Penguin Random House aseguró que no ha comprado ni rentado espacios para promocionar el material. «El despliegue de espectaculares no forma parte de la estrategia de promoción de nuestros libros», indicó.
Asimismo, la misma editora rechazaron haber pagado por espectaculares en donde se promociona el libro de Marcelo Ebrard, tal como lo aseguró el aspirante a la candidatura presidencial de Morena.
Las fuentes se dijeron sorprendidas de que el ex Canciller justificara la colocación de espectaculares argumentando que había sido la editorial Aguilar, sello de esta empresa, la que había contratado la propaganda para promocionar su imagen con el libro «El Camino de México».
Con información de Reforma, El Economista y Excelsior.
dmra
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