Ismael “El Mayo” Zambada compareció ante el juez federal Brian Cogan en Nueva York para una audiencia preliminar relacionada con los 17 cargos que enfrenta, entre ellos uno que podría llevar a la pena de muerte, aunque esta opción aún no ha sido confirmada por los fiscales. Zambada es acusado de liderar una organización criminal desde 1989 hasta 2024, involucrada en actividades de narcotráfico, lavado de dinero y portación de armas de fuego, lo que podría derivar en una cadena perpetua.
El caso de Zambada, que se encuentra en la misma corte donde fueron juzgados Joaquín “El Chapo” Guzmán y el exsecretario de Seguridad Pública de México, Genaro García Luna, ha sido programado para una nueva audiencia el 15 de enero de 2025, donde se abordarán más detalles del proceso. Entre los cargos que enfrenta se incluyen la ampliación de delitos por tráfico de fentanilo y la prolongación de sus actividades delictivas hasta este año.
Durante la audiencia, se planteó un posible conflicto de intereses relacionado con su abogado principal, Frank Pérez, quien también ha representado a Vicente Zambada, hijo del acusado y testigo cooperante del gobierno estadounidense. Este conflicto surge ante la posibilidad de que Vicente Zambada testifique en contra de su padre en un eventual juicio, un tema que sigue pendiente.
El juez Cogan y los fiscales destacaron que las actividades de narcotráfico encabezadas por Zambada han provocado múltiples muertes en Estados Unidos, lo que hace que el caso sea elegible para la pena de muerte. Sin embargo, no se ha decidido si los fiscales buscarán esa sentencia. Parte de la evidencia que se presentará en su contra proviene de los juicios previos de El Chapo y García Luna, los cuales se llevaron a cabo en la misma corte.
Zambada, quien ha estado bajo custodia de las autoridades federales de Estados Unidos desde el 25 de julio, se mostró tranquilo durante la audiencia, donde se reforzaron las medidas de seguridad, incluida la vigilancia de cinco agentes del US Marshall Service. Aunque el proceso judicial sigue en sus primeras etapas, no se descarta la posibilidad de que el acusado llegue a un acuerdo de cooperación con los fiscales para evitar un juicio.
Con información de Política.
AR
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