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IMPUESTOS APROBADOS Y LA DESCONEXIÓN CIUDADANA

Han pasado más de dos semanas y siguen llegando a la Cámara de Diputados comunicaciones y correos de la ciudadanía por medio de los cuales piden que no se aumenten los impuestos a los videojuegos violentos. Lamentablemente, la Ley de Ingresos y la Ley del IEPS se discutieron, se votaron y fueron aprobadas con mínimas modificaciones por la mayoría legislativa. ¿Será que nadie se enteró de qué es lo que se aprobó? Ahora lo analizaremos.

En una semana muy agotadora de cuatro días de discusión, la productiva legislatura actual aprobó las reformas a la Ley de Amparo, a la Ley de Derechos, a la del IEPS, al Código Fiscal y finalmente, a la Ley de Ingresos.

Esto es muy importante, pues, descontando el Amparo, estas leyes constituyen la primera parte del Paquete Económico que envía anualmente la Presidencia de la República para que sea discutido y aprobado por el Congreso.

Esta parte del paquete se puede resumir en la definición de lo que el Gobierno recaudará a través de impuestos y derechos pagados por la ciudadanía y por las empresas nacionales o extranjeras. De ello depende la cantidad con la que el Estado contará y a partir de lo cual definirá en qué cosas puede gastar.

La ley más importante de esta etapa es la Ley de Ingresos de la Federación, porque este documento define cuánto dinero se espera recaudar de los impuestos y cuánto dinero se tiene que pedir en forma de deuda para cumplir con los compromisos del gobierno en turno.

De las aportaciones más importantes de la Presidenta Sheinbaum está el que muchos de los ingresos generados se destinarán a fortalecer el Fondo de Pensiones del Bienestar, creado por el Presidente AMLO, que se espera que sea una herramienta para el financiamiento de una gran base poblacional que en unas décadas envejecerá y deberá enfrentarse al problema de saber cómo se financiará a una población tan robusta como esa.

Impuestos Saludables
El otro gran tema que los medios manejaron y que causó gran controversia fueron los impuestos añadidos o incrementados en la Ley del IEPS (Impuesto Especial sobre Producción y Servicios): videojuegos, tabaco, refrescos, bebidas alcohólicas y azucaradas.
Se aplicó un aumento del 200% a la cuota por cigarro importado; de 3.08 pesos por litro de refresco regular; del 8% a videojuegos con contenido violento; y del 70% a membresías de videojuegos que incluyan este tipo de contenido violento y no hagan el desglose del precio.

Sin duda pareciera que el argumento de desincentivar el consumo de este tipo de productos carece de sustento, y sin embargo el gobierno de Peña Nieto fue el primero en impulsar este Impuesto Especial para refrescos en 2014. Como resultado medible de dicha política se obtuvo un 10% menos de consumo en este tipo de productos, según el Centro de Investigación en Nutrición y Salud.
No es un movimiento unilateral ya que existen diversas recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud para que en 2035 se suba el precio de este tipo de bebidas edulcoradas hasta en un 50%.

La realidad golpea a nuestro país, pues somos el primer lugar mundial en obesidad infantil. Sin contar que, al mes, según la Secretaría de la Salud tenemos un promedio de 74 amputaciones de extremidades inferiores debido a la diabetes.

Estimadx Diputadx…
Es increíble, que al 28 de octubre de 2025 sigan llegando correos y cartas a las y los diputados, sobre todo de personas originarias de Guanajuato, pidiendo que no aprueben el aumento del 8% a los videojuegos violentos porque desde su perspectiva no incentiva comportamientos violentos ni aumenta el clima de inseguridad.

Pareciera ser que en la comunidad gamer no se suelen ver noticias y que de la ardua discusión que tuvo un espacio en casi todos los medios de comunicación no se les dio ni por enterados.

Esto no solo es un triste intento tardío y lo que bien podría llamarse como la trágica historia de una causa perdida, sino que devela un real problema social, la falta de politización del pueblo mexicano. A muy pocas personas les importa escuchar, investigar y exigir el saber algo al respecto de la cuenta pública nacional.

No culpo del todo a la ciudadanía, ya que debe ser difícil viajar tres horas diarias para ir y venir del trabajo, llegar a cocinar y atender a las infancias, a la pareja o a las mascotas para luego prender las noticias y preguntarse qué rayos significa el que se le aumente la tasa del 100% del IEPS a las plataformas de apuestas digitales.

Sin duda, no todas las personas deben saber con detalle lo que se aprueba en el Congreso, sin embargo, ya que hay una clara tendencia de los medios de comunicación por bombardear las políticas públicas más polémicas, aquellas personas a las que les afecta directamente una u otra propuesta deberían ser las más atentas y las más preocupadas por hablar con sus representantes.

De primera mano puedo testificar que quien lo pide, muchas veces obtiene citas con sus diputados y diputadas, lo único que debería esperarse de las personas ciudadanas afectadas en los precios de sus productos de lujo es que pausaran un momento Roblox y prendieran el Canal del Congreso.

Por eso agradezco la doble función de esta columna: platicar contigo, con quien la lee, un poco de los detalles que las diputaciones aprobaron en este paquete de ingresos, el cual afectará el pago de impuestos; y el espacio para quejarme de lo lejos que está la vida pública de las y los ciudadanos en general.

 

Javier Esperanza

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