Estados Unidos y México crearon un acuerdo bilateral con el fin de evitar que productos de origen chino evadan aranceles. Aplicarán nuevas medidas de “fundido y colado” para frenar la entrada de acero y aluminio proveniente de China y otros países a territorio estadunidense sin el pago correspondiente de aranceles.
En una declaración conjunta de los presidentes de ambos países, que difundió la Casa Blanca, se destaca que el objetivo de estas normas es “proteger los mercados norteamericanos (…) del comercio desleal”.
“México y Estados Unidos están adoptando hoy medidas clave para proteger los mercados norteamericanos de acero y aluminio del comercio desleal. Ambos países pondrán en marcha políticas para prevenir conjuntamente la evasión arancelaria en el acero y el aluminio, y fortalecer las cadenas de suministro de acero y aluminio en América del Norte (México, Estados Unidos y Canadá)”, explicó la Casa Blanca en un comunicado.
Para mejorar la transparencia de las mercancía, México está exigiendo a los importadores que proporcionen más información sobre el origen de los productos de acero y aumentó los aranceles a la aleación que proviene de países que no son signatarios de un tratado de libre comercio, detalla la “Declaración conjunta del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, sobre las medidas para proteger los mercados de acero y aluminio de América del Norte”.
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Sin embargo, con el fin complementar esas acciones, Estados Unidos pondrá en práctica requisitos de fundido y colado para ciertas importaciones de acero y aluminio provenientes de México, y que de esa manera ingresen a Estados Unidos libres de aranceles conforme a la Sección 232 de la Ley de Expansión Comercial de 1962.
Las importaciones de productos de acero procedentes de México estarán sujetas a aranceles estadunidenses de 25 por ciento en virtud de la Sección 232, a menos que se documente que el acero ha sido fundido y vertido en su vecino del sur, Estados Unidos o Canadá. Lo mismo con el aluminio, para evitar que paguen el gravamen de 10 por ciento no debe ser fundido o colado en China, Rusia, Bielorrusia o Irán.
Los importadores de estos productos en Estados Unidos tendrán que presentar un certificado de análisis al Servicio de Aduanas y Protección de Fronteras nacional en el que conste el país de origen de los metales.
“Estas acciones solucionan un vacío legal importante que la administración anterior no logró abordar, y que países como China utilizan para evitar los aranceles estadunidenses enviando sus productos a través de México”, declaró a la prensa Lael Brainard, asesora económica de la Casa Blanca. “El acero y el aluminio chinos que entran en el mercado estadunidense a través de México eluden los aranceles, socavan nuestras inversiones y perjudican a los trabajadores estadounidenses de estados como Pensilvania y Ohio”, agregó, citada por agencias.
Desde hace meses, Estados Unidos ha impulsado sus quejas sobre mercancía china que entra a su territorio a través de México, aprovechando el T-MEC, para eludir el pago correspondiente de impuestos, y ha amagado con llevar su descontento a la revisión del acuerdo comercial de América del Norte, prevista para 2026.
Con información de: La Jornada
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